¡Bienvenid@s!

La idea de este blog es estar un poco más cerca de mis amig@s y herman@s entrañables que hemos conocido por el recorrido que hicimos con mi esposo a través de nuestro ministerio en Perú, Argentina y ahora en Chile, principalmente me gustaría compartirles devocionales bíblicos, experiencias, recomendarles libros, música y otros sitios de nuestro interés. Espero leer sus comentarios y reflexiones!

miércoles, 25 de noviembre de 2009

RAICES FUERTES Y PROFUNDAS- Raíces signo de vida (Isaías 11:10)

Por mucho tiempo frente a la casa dónde vivíamos, había un árbol frondoso y muy alto, sus raíces eran muy profundas, tanto que levantaba la vereda de la casa. Entonces decidieron cortarlo, pero sus raíces eran tan profundas que fue casi imposible sacarlo. Y quedó parte de la raíz en la profundidad, estoy segura que muy pronto veremos sus retoños, porque esas raíces los harán renacer y le darán vida.

En la biblia encontramos la raíz como metáfora para mostrar al Mesías como la raíz de Isaí, el cual estaría puesta por pendón. De la descendencia de Isaí nacería Jesús de Nazaret, el Redentor del mundo, en quien él mundo tendría que buscar y encontrar refugio y vida. Cuando nosotros encontramos a Jesucristo, él nos dio vida, para crecer, y ser fortalecidos por su evangelio del reino y por su Palabra que alumbra nuestro camino, El ha hecho que resplandezca la luz en medio de la oscuridad.

Hay algunas personas que creen alcanzar ciertos méritos religiosos, ellos creen en la autoayuda sin Jesús como mediador, creen que es posible ser cristiano sin compromiso, sin entrega completa a Dios. Estas son personas sin raíces profundas, que ante los vientos de los desafíos de la vida sienten que Dios no los acompaña. Son como en la parábola del sembrador. La semilla había caído en pedregales, donde no tenía mucha tierra, y brotó pronto porque no tenía profundidad de tierra. Pero salido el sol se quemó, y porque no tenía raíz se secó. Marcos 4:5-6. La raíz es muy importante para que un árbol siga creciendo. Cuando nosotros queremos dirigir nuestra vida, únicamente por nuestra racionalidad o nuestros sentimientos siempre vamos a fracasar, porque los problemas, las tentaciones y las adversidades serán más fuertes que no podremos resistir.

En esta metáfora encontramos que nuestro Señor Jesucristo es la raíz, de la que ha retoñado el reino de Dios en la historia y por esto mismo en nuestras vidas. Si buscamos hacer su voluntad, nos sentiremos fortalecidos al enfrentarnos a las tentaciones. El estudio de su Palabra y la oración nos permitirá acercarnos a El y busquemos su guía en nuestras decisiones porque El tiene grandes propósitos para nuestra vida. Que la fortaleza de Dios nos ayude a permanecer firmes porque nada ni nadie nos arrebatará de sus manos.

miércoles, 24 de junio de 2009

EL PERDON I Salmo 51; Salmo 103:3-4 1; Juan 1:9

PERDONAR ES UN MANDATO NO UNA SUGERENCIA
Jesús al revelarnos en su Palabra nos dio principios básicos sobre el perdón, cuando nos enseñó a orar nos dijo diríjanse al Dios como Padre y pídanle que les perdone como ustedes también perdonan y ante la pregunta de Pedro sobre que tanto hay que perdonar, Jesús le responde siempre, siempre hay que perdonar, hasta “setenta veces siete”. El evangelio nos enseña que la práctica del perdón entre nosotros los seres humanos es su más grande desafío. “Si ustedes se perdonan sus ofensas, cuanto más vuestro Padre celestial les perdonará”, Mateo 18:21, Mt, 6:14.

En nuestra cultura el pedir perdón es común y natural, tanto que usamos la palabra perdón muchas veces al día: y por cualquier motivo decimos perdón que hora tiene, perdón te lastimé, perdón por llegar tarde, disculpa no te vi, etc. El perdón tiende a ser muy superficial. Pero también puede llegar a ser opcional y manejado por el orgullo y el egoísmo, genera grandes resentimientos de allí las expresiones mas comunes son, ¿Yo, pedirle perdón? No, ella o él me ofendieron. ¡Algún día si me da la gana le pediré perdón o le perdonaré! Entre tanto su vida se va alimentando de odio tristeza, amargura y finalmente antipatía.

¿Por qué nos cuesta perdonar? Puede ser por dos motivos: primero no hemos experimentado el perdón de Dios y el segundo, no nos hemos perdonado a nosotros mismos, mucho menos podríamos perdonar a otros. Sin embargo, perdonar es amar, cuando la Biblia dice ama a Dios con todo tu corazón y con toda tu fuerza y a tu prójimo como a ti mismo está diciendo que primero tenemos que amarnos a nosotros mismos para amar a los demás, la expresión más grande de este amor es el perdón.

EL PERDÓN DE DIOS Y SUS RESULTADOS

La experiencia mas grande y bendecida de nuestra vida es haber restablecido nuestra relación con Dios, habiendo superado nuestra ofensa a causa de nuestro pecado transgresor. Esta barrera que se levantó a causa de la desobediencia, se constituyó en una especie de pared que nos impide la comunicación y la comunión con El. El pecado nos llena de tristeza y depresión. Como le ocurre al salmista, se va el gozo y la alegría, por ello busca el perdón de Dios a quien ha ofendido, solo EL puede perdonar su desobediencia y liberarlo de la culpa de la conciencia y recuerdo de haberle ofendido, [Salmo 51:10].

El perdón libera y trae la paz de Dios que invade el corazón. Se trata de un perdón que perdona todas las faltas, que termina sanando todas las dolencias, inclusive las que se han originado en nuestra desobediencia espiritual. Así nos muestra en Salmo 103: 3-4, diciéndonos, “El perdona todas tus culpas, cura tus dolencias, rescata tu vida del hoyo”. Dios, es quien rescata tu vida, de la fosa deprimente.

Una vida saludable, integral, es nuestro anhelo, aun para algunos que vivimos sobrellevando el deterioro natural del paso de los años o la discapacidad. Él con amor y ternura, dice el salmista, comienza a hacerse sentir en toda nuestra vida, estabiliza nuestro organismo, modera nuestros sentimientos y emociones, nuestra mente se hace más lúcida y nos damos cuenta que si es posible hacer la voluntad de Dios. Entonces somos renovados como el águila, nos sentimos rejuvenecidos, aliviados en nuestros dolores y que podemos volar sobre las nubes pequeñas cargadas de dificultades y tentaciones.

Es por esta calidad de vida, a la que aspiramos que el apóstol Juan nos advierta sobre la importancia de confesar al Dios de Luz, ante quien se trata más de reconocer, las tinieblas de nuestra vida, porque le hemos ofendido. Juan nos dice que es posible caminar en su luz y en comunión, sin engañarnos. Dios es fiel y justo para perdonar nuestros pecados y limpiarnos de toda maldad porque la sangre de Jesucristo su hijo nos limpia de todo pecado. El sacrificio de Jesucristo nos acerca a Dios, quien nos perdona por la vida de su Hijo ofrecida para nuestra salud, 1 Juan 1:5-10.

sábado, 7 de marzo de 2009

MUJER CON OJOS EN LA ESPERANZA

RUT 1.16
A lo largo de la historia, la mujer ocupa un rol muy importante en la creación de Dios.
Si, ella entiende para que ha sido creada.
En la biblia hay varios ejemplos, una de ellas es Rut la moabita, aun perteneciendo a un pueblo pagano, que seguía las supersticiones tradicionales, comprendió que el Dios de la familia de su esposo, era real y verdadero.

Aun en medio de su dolor por la pérdida del ser más querido, su esposo, tuvo la valentía de seguir firme en comprender lo que Dios hacía en su vida. De fuertes convicciones, se levantó, secó sus lágrimas y fijó sus ojos en el Dios de la esperanza que albergaba a la familia a la que se había unido. Con firmeza le dice a su suegra. No me ruegues que te deje, y me aparte de ti; porque adonde quiera que tú fueres, iré yo, y donde quiera que vivieres, viviré. Tu pueblo será mi pueblo, y tu Dios mi Dios.
Rut fue una mujer que entendió que la vida está dirigida y gobernada por Dios y que su fe y esperanza debería estar puesta en Él. No sabía que le iba a venir mas adelante pero si tenía la esperanza, en el propósito de Dios, que cada día se hacía más claro en su vida.
Esta historia es un ejemplo que se une al de muchas mujeres, que en medio de las circunstancias difíciles, profundamente personales y privadas, en los desafíos de la vida matrimonial, del privilegio de ser padres, en las enfermedades, en la pérdida de un familiar o del trabajo, no retroceden, porque entendieron que la esperanza, es confiar que todo es posible en Dios, quien nunca les abandonará pase lo que pase.


Es por ello que me permito decir a todas mis amigas, tú eres una mujer con un corazón lleno de esperanza que puede contagiar para continuar y seguir el camino, no solamente a la familia sino también a tus amigas que están sufriendo ya que el sentido de su vida no tiene rumbo. Que al felicitarnos en este día por ser mujer sea motivo de gratitud y alegría en aquel que nos creó con propósitos eternos para su gloria. ¡FELIZ DIA AMIGA!.

viernes, 16 de enero de 2009

Nuestro Primer Libro!

Deseamos compartirles la edición impresa de la versión electrónica de A solas con Jesús, nuestro primer libro ha sido impreso en el Perú dónde nos encontramos junto a mi esposo, visitando a nuestros familiares amigos, compartimos con todos uds, pueden leerlo haciendo clik en la imagen



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jueves, 25 de diciembre de 2008

EXPERIMENTANDO LOS PLANES DE DIOS

…Y dio a luz a su primogénito y lo envolvió en pañales y lo acostó en un pesebre,
Porque no había lugar para ellos en el mesón.
Lucas 2:1-7

Qué tiempo de espera, parece muy largo, entremezclado de angustia y alegría. Más aún si llegado el día del parto no se encontraba un lugar donde dar a luz al niño tan esperado, todos los mesones y hospedajes estaban ocupados. Habría sido frustrante, doloroso y a la vez emocionalmente fuerte para María y José, ellos hubieran insistido o luchado buscando privilegios siendo que el Salvador el Rey de reyes vino a nacer. Sin embargo, ellos se hospedaron, en un pesebre signo de humildad y sencillez, aun en pequeños grandes detalles aprendemos de nuestro Señor, respetar los derechos de los demás, no importa el lugar que uno ocupa. Es allí en aquel lugar sencillo comienza a transformase la tristeza en gozo. Y también comienza los preparativos del alumbramiento. Esta será su más grande experiencia y privilegio de dar a luz al Rey de reyes. ¿Algo le habría contado su prima Elizabeth, del alumbramiento de su sobrino Juan? posiblemente. Y María habría compartido con José, y él la ayudaría. La ternura de ambos haría de este nacimiento un acontecimiento que siempre la historia recordaría.
Ella y José sabían, por adelantado, que esperaban un varón del linaje de David. Por más de ocho meses, no solo esperaba su primogénito sino era la espera más esperada del pueblo de Dios. María, como en todo alumbramiento siente la fuerza de sus emociones y a la vez la alegría de la experiencia de ser madre, no cesaba de dar gracias a su Señor. El sueño de toda mujer judía era ser la madre del Mesías, se había hecho realidad en su vida. Jesús llegaba dentro del más grande proyecto de Dios para la humanidad. En que la salvación se manifiesta en la vida de Jesús quien es el cordero de Dios que quita el pecado del mundo.
. Pastores, magos, ángeles, van pasando por la casa donde estaba el establo donde María dio a luz al niño. Diversas actitudes, podemos vislumbrar, actitudes de misericordia por el lugar en el que ha nacido el niño; actitudes de preocupación, preguntándose, ¿será este un hijo de David, pero por qué en un pesebre?; pero diciéndose con alegría y admiración nos ha nacido un salvador, como lo había prometido el Señor, una virgen dará a luz un hijo, que será Emmanuel, Dios con nosotros.
Contradictorio, tal vez, que el Rey de reyes naciera así. La historia nos dice que no hubo lugar para ellos en el Mesón. María y José tuvieron que experimentar lo que se estaba revelando, a través de ellos. Dios se estaba despojando de su gloria, su humillación hasta lo sumo había comenzado y camino que alumbraría nuestras vidas y guiándonos a tener paz con Dios y ser pacificadores, para que abunde el amor.
Que en este tiempo de pascuas, donde no haya amor abunde el amor de Dios.
Que la felicidad sea haber encontrado, después de un largo viaje o tal vez de un trecho cercano, en los campos de Belén, en ese establo, al Dios que ha entrado en nuestra historia, en la historia de nuestras familias y la historia de nuestras vidas.
Kelit

viernes, 17 de octubre de 2008

El poeta del camino

1.1.1. El poeta del Camino
El poeta del salmo 119 recurrió a la metáfora del camino para hablarnos del sentido de la vida en la cual andamos. Nos dice que unos son nuestros caminos y otros son los del Señor (3). Meditar y considerar los caminos del Señor, produce alegría (15). La soberbia hace desviarse de los caminos del Señor (21). El poeta trasluce una experiencia de sinceramiento “mis caminos te he manifestado”, y no alcanzo a entender el camino en el que me guías, ayúdame (26-27).
En la angustia y la ansiedad, me he apegado a tu palabra, he escogido el camino de la verdad y quiero correr en ese camino, bajo tu guía como mi “personal trainer”, cuando ensanches mi corazón (29,32). “Avívame en tu camino”, confirma tu palabra, vivifícame en tu justicia y andaré en la libertad, que he buscado tras duro caminar, aún por tierras y parajes extraños (37, 40, 45, 54).
Desandar el camino y volver al punto de partida y caminar seguro incluso en compañía de impíos, pero soy compañero de los que hacen tu voluntad (59-61). Desandar el camino puede ser humillante, al confrontarnos con los soberbios, aquellos que tratan de desviarnos del camino, pero nosotros nos mantendremos firmes y fieles guardando su palabra y nos regocijaremos en El. Nos librará y nos llevará de victoria en victoria. Este es un aprendizaje de buen sentido y sabiduría y de reencuentro con la comunidad que reverencia al Señor y ama la verdad y juntos nos alegraremos porque en su palabra hemos esperado. (66, 67,71,79).

En el caminar, por los caminos abruptos hay que mirar bien, hay “hoyos cavados” a propósito, algunos son trampas para animales, otros están puestos para hacernos tropezar y derribarnos (85, 87). Y no faltan los peligrosos pues puede aguardar el enemigo que nos hace una emboscada para impedir nuestro avance y destruirnos (95)
El mal camino, nos atrae, pero podemos evitarlo “contener nuestros pies” y censurar, criticar, el camino de mentira, alumbrados por la palabra de Dios para no desorientarnos y llegar al final del camino (101,104, 105, 110, 112).
En obscuridad del camino, en la noche oscura del alma, el camino de falsedad, una luz para continuar o un refugio para pasar la noche es algo que se espera con ansiedad. La luz que nos alumbra en la obscuridad, del camino, hacen “desfallecer nuestros ojos”, la salvación y la justicia en la palabra nos sorprende, nos vislumbra en medio de la incertidumbre, allí es cuando pedimos que el Señor “ordene nuestros pasos” y nos enseñe el camino por donde El quiere que andemos. Sus caminos son rectos e inseparables, como los rieles. Pero los que nos persiguen, que no nos quieren, se alejan desviándose y acercándose a la maldad, (113-114, 123,128, 133,135,138, 150, 157).

Nuestros caminos están delante del Señor, porque andamos en paz y no tropezamos al ser guiados por la palabra, y la comunión a través de la oración brotará de nuestra boca alabanza y adoración a su nombre, y proclamar sus mandamientos y su justicia, mientras estamos en el camino.

martes, 29 de julio de 2008

LA VIDA y El AMOR

1 Juan 4:16-18
"Y nosotros hemos conocido y creído el amor que Dios tiene para con nosotros. …Dios es amor y el que permanece en amor, permanece en Dios y Dios con él."
Cuando era niña, recuerdo una clase en la que la profesora nos preguntó, qué es el amor? Hubo una respuesta espontánea de mi compañera y contestó: Amor es el pan de la vida. Ésto dice un verso de una canción popular. Fue una contestación apresurada, inesperada, ocurrente que todos nos reímos porque sabíamos que esa respuesta era sacada de una canción. El amor como un sentimiento que alimenta la vida, que sustenta nuestro ser está presente en la apreciación de la realidad del ser humano.
Cuando nosotros reflexionamos desde lo bíblico y lo teológico comprendemos que ese amor solo puede venir de Dios a nuestras vidas, porque Dios es amor. Fuimos creados con propósitos especiales, vivir la vida en amor es parte de ese propósito. Cuando Dios le dijo a su pueblo con amor eterno te he amado, le habló de ese amor que no tiene límites. El proyecto de Dios para nuestra vida esta sustentado en ese amor, no solamente en los triunfos, sino también en las dificultades, para que superándolas nos lleve a la victoria.

Dios está permanentemente mostrándonos su amor, la prueba más desafiante es el envió de su Hijo para morir en lugar nuestro por nuestros pecados, y así hacer posible el perdón, devolviéndonos la vida para ser partícipes plenamente de su amor.
Es por ello que Dios nos pide que no abandonemos ese amor, que sustenta nuestra vida. Permanecer en ese amor es poder resistir los temporales de la vida. Cuando entregamos nuestra vida a Jesucristo, se muestra con mas profundidad la imagen de Dios, porque nuestro corazón, nuestra mente, nuestros sentimientos y decisiones están inundados de su amor. Pablo dice que este amor de Dios se impone en nuestra vida, nos constriñe, inunda nuestra existencia. Entonces es posible dar a otros y compartir ese amor que sobrepasa la incomprensión y solo se vive, como una gratuidad de parte de Dios. Permanecer en ese amor muchas veces nos cuesta, porque nos es mucho más fácil recibir amor, que dar amor.

Cuando pasamos por diversas situaciones en nuestra vida creemos que nadie se preocupa por nosotros, sentimos angustia, rencor, nostalgia, hasta llegar a desesperarnos y finalmente considerar que tal vez Dios se ha olvidado de nosotros. Sin embargo Dios con su expresión de amor está ahí permanentemente, mirando no solo nuestra tristeza sino también nuestras dudas que nos desvían hacia la altivez y nos consideramos fuertes, somos tentados a la arrogancia y el orgullo, entonces le huimos a los afectos. Dios entonces se entristece porque nos mostramos como quien ha perdido la capacidad de amar y nos cuesta conocerle más profundamente, en medio del temporal que viene a nuestras vidas. Ese amor que nos sustenta ha sido depositado en nosotros para ser transparente, sincero para con Dios. No lo puede ser de otra manera, no puede ser fingido, permanecemos en su amor.
El apóstol nos dice en el amor no hay temor, sino que el perfecto amor echa fuera el temor. Que fácil es leer estas frases, que difícil es hacer realidad en nuestra vida especialmente en los momentos en que el temor nos angustia. Estos días mi hijo Josué me decía mamá, Dios tiene que sanar primero nuestros temores. En nuestra visión de la vida el amor debe imponerse sobre el temor. Esto es una gran verdad, al encontrarme nuevamente con esta Palabra, le pedí perdón al Señor por mis temores, y que ayuda para seguir confiando en que su amor sustenta mi vida inmejorablemente. Echado el temor, no sin una lucha angustiosa, experimenté un sentimiento de confianza y que la Palabra del Señor iba siendo una luz en la noche oscura de la angustia. El amor sustenta mi vida y el temor no va a remecer sus cimientos. Todos nosotros hemos experimentado temores en nuestra vida, que podría provocar buscar soluciones ligeras consejos equivocados. Pero gracias a Dios que tenemos su Palabra para recibir su consejo directamente y actuar sabiamente, entendiendo su voluntad y las muestras de su amor en cuidado, afecto, seguridad, en medio de la angustia.
Kelit Pérez.